SUBVENCIÓN • Las empresas quieren que los precios de los combustibles sean desregulados.
Carlos Villegas (izq.) estrecha la mano de Andrés Soliz, quien renunció a su cargo por discrepancias con algunas autoridades del Poder Ejecutivo. Las empresas petroleras que negocian con el Gobierno los nuevos contratos de operación tienen “terribles exigencias” antes de firmar estos documentos, reveló ayer el ex ministro de Hidrocarburos Andrés Soliz Rada, al transferir su despacho al nuevo titular del sector, Carlos Villegas. Las negociaciones no son fáciles y el equipo negociador, compuesto principalmente por los ministros del área económica (Planificación del Desarrollo, Hacienda e Hidrocarburos), debe enfrentar las grandes exigencias de estas compañías, señaló. Para la firma de los nuevos contratos, las empresas petroleras piden al Gobierno que se elimine la subvención estatal a los carburantes y que éstos se comercialicen de acuerdo a los precios internacionales del petróleo. Otra de las exigencias que plantean es el derecho de anotar en la Bolsa de Valores de Nueva York el valor de las reservas del gas boliviano como suyas, cuando esta acción ha sido ya denunciada por el Gobierno a la comunidad internacional, recordó Soliz. Por otra parte, en contra del espíritu de la nacionalización, también las petroleras buscan mantener el derecho de comercializar los recursos hidrocarburíferos. Argumentan tener los mercados y los contactos en el exterior, explicó Soliz. También exigen niveles aceptables de ganancia, aunque para ellos — aclaró la ex autoridad — las palabras “ganancias aceptables” significa un mínimo ingreso para Bolivia. Además, durante las negociaciones plantean tener libertad operacional. Ante estas exigencias reflejadas por las compañías que operan en el país, Soliz Rada sacó la conclusión de que las petroleras en el fondo lo que quieren es que el decreto de nacionalización se quede en papel y no se cumpla, “cuando éste es un objetivo fundamental del país”. Añadió que los ejecutivos de estas empresas también amenazaron con la paralización de las inversiones para desarrollar los campos. Sostuvo que este hecho perjudicaría la producción nacional de hidrocarburos. Éste es un argumento falso, subrayó Soliz al explicar que, por ejemplo, Petrobras está interesada en el desarrollo de los campos gasíferos, de manera inmediata, debido a que debe atender las necesidades de un gran polo industrial como es San Paulo, por lo que no puede paralizar su actividad. “Entonces las más interesadas en invertir es Petrobras”, lo cual debe ser aprovechado por el Gobierno, y mantenerse firme en las negociaciones, sugirió. De la misma forma, Argentina tiene estas necesidades, explicó la ex autoridad, aunque “este país ha sido más honesto y reconoció sus requerimientos y dejó en manos de Enarsa (Energía Argentina SA) la inversión para el desarrollo de los campos de hidrocarburos en Bolivia”. En este contexto, Soliz aseguró que la historia de que no existen inversiones y de que “nos vamos a morir” por la falta de ellas, no es evidente. Refiriéndose a las negociaciones de los contratos con las petroleras, indicó que para llevarlas adelante es necesaria la unidad y coherencia interna entre todos los entes relacionados al sector hidrocarburos (Ministerio, Superintendencia y YPFB), ya que se trata de un mismo equipo. Al reconocer que hasta ahora no se actuó de forma coherente, dijo que la responsabilidad la tiene el Ministerio de Hidrocarburos, cuya cabeza ahora es el ministro Carlos Villegas, en quien Soliz confía por su honradez y su capacidad de negociación. “Por eso podemos decir conjuntamente que toda la plata de las petroleras no alcanza para comprar nuestra conciencia”, subrayó la ex autoridad. CONDICIONES Precio • Las empresas petroleras piden la eliminación de la subvención de hidrocarburos en el mercado interno y que los precios se fijen de acuerdo a los precios internacionales. Valores • Las compañías quieren que las reservas de gas figuren como suyas en la Bolsa de Valores de Nueva York. Estratégico • Las petroleras buscan mantener la comercialización en sus manos. Las acciones pendientes 1 Soliz recomendó a Villegas no desmantelar el equipo que realiza las auditorías a las petroleras, que está encabezada por Enrique Mariaca. 2 Pidió luchar por el control de los productos que salen de las refinerías, que significarán más de $us 200 millones de ingresos para capitalizar YPFB. 3 Al momento de firmar el contrato de ampliación de volúmenes de gas de exportación con Argentina, dijo que debe figurar en el documento el compromiso de construcción de una planta separadora de líquidos en territorio boliviano. 4 Recomendó tener firmeza en la negociación del precio del gas con la Argentina. “Se debe tener un poco de paciencia para resistir y lograr un acuerdo con buenas condiciones para el país”, indicó. 5 Durante la negociación, la ex autoridad señaló que el equipo de hidrocarburos debe tomar en cuenta las verdaderas intenciones de Brasil. “Que diga lo que diga, realmente necesita del gas boliviano”. 6 También pidió velar por que el gas sirva para cumplir políticas de industrialización. |
SUBSIDY • Companies Want to Deregulate Fuel Prices.
Carlos Villegas (Left) shakes hands with Andrés Soliz, who resigned from his position due to disagreements with some authorities in the Executive Branch. The oil companies that negotiate new contracts of operation with the Government make “terrible demands” before signing the contracts, ex-Hydrocarbons Minister Andrés Soliz Rada revealed yesterday, upon transferring his office to the new minister of the energy sector, Carlos Villegas. The negotiations are not easy, and the negotiating team, composed mainly of the ministers in the economic field (Development Planning, Finance, and Hydrocarbons), must confront the great demands by these companies, Soliz Rada pointed out. In exchange for the signing of new contracts, the oil companies demand that the Government eliminate state subsidy for fuels and that fuels be marketed according to international petroleum prices. Another of the demands made by the companies is the right to register the value of the Bolivian gas reserves as their own in the New York Stock Exchange, when this action has already been denounced to the international community by the Government, recalled Soliz. On the other hand, against the spirit of nationalization, the oil companies also seek to maintain the right to market the hydrocarbon resources. They argue they should have foreign markets and contacts, explained Soliz. Moreover, the oil companies demand acceptable levels of profit, although for them — clarified the ex-minister — the words “acceptable profits” mean a minimum revenue for Bolivia. In addition, during the negotiations, they push to obtain operational freedom. Facing these demands expressed by the companies that operate in the country, Soliz Rada drew the conclusion that what the oil companies want, deep down, is for the nationalization decree to remain on paper, unfulfilled, “when this is a fundamental goal of the country.” Soliz Rada added that the executives of these companies also threatened to paralyze the investments to develop the fields. They maintained that this action would harm the national hydrocarbon production. That is a false argument, emphasized Soliz, explaining that, for example, Petrobras is interested in developing the gas fields immediately, because it must take care of the needs of a great industrial pole such as San Paulo, which is why it cannot stop its activity. “Therefore, the party most interested in investing is Petrobras,” the fact that must be exploited by the Government, which should stand firm in the negotiations, Soliz suggested. In the same way, Argentina has similar needs, explained the ex-minister, although “this country has been more honest and recognized its requirements and left in the hands of Enarsa (Energía Argentina SA) the investment for the development of hydrocarbon fields in Bolivia.” In this context, Soliz assured that the story that investments will vanish and “we are going to die” of their absence is not self-evident. Speaking of the contract negotiations with the oil companies, Soliz Rada indicated that, in order to move them forward, the internal unity and coherence among all the institutions related to the hydrocarbons sector (Ministry, Superintendent [of Banks and Financial Entities], and YPFB) is necessary, since it’s about the same team. Admitting that until now the government had not acted coherently, Soliz Rada said that the responsibility lies with the Hydrocarbons Ministry, now headed by Minister Carlos Villegas, whom Soliz trusts for his honesty and his capacity for negotiation. “That is why we can say together that all the money of the oil companies isn’t enough to buy our conscience,” emphasized the ex-minister. CONDITIONS Price • The oil companies want the elimination of hydrocarbon subsidy in the internal market, demanding that domestic prices be set according to international prices. Values • The companies wish to represent the gas reserves as theirs in the New York Stock Exchange. Strategic • The oil companies seek to maintain marketing in their hands. The Pending Actions 1. Soliz recommended to Villegas that he not dismantle the team that audits the oil companies, which is headed by Enrique Mariaca. 2. Soliz urged the Bolivians to fight for the control of the products that leave the refineries, which will mean more than US$ 200 million in revenues to capitalize YPFB. 3. At the time of signing the contract to expand volumes of gas export to Argentina, Soliz said, the commitment to construct a liquid separating plant in Bolivian territory must be in the document. 4. Soliz recommended that Bolivia stand firm in the gas price negotiation with Argentina. He said, “A little patience is necessary in order to resist and to win an agreement with good conditions for the country.” 5. The ex-minister maintained that, during the negotiation, the hydrocarbon team must take the true intentions of Brazil into account. “Whatever Brazil says, it really needs the Bolivian gas.” 6. Furthermore, he exhorted the Bolivians to remain vigilant and see that the gas serve to fulfill policies of industrialization. |
This article about Andrés Soliz Rada first appeared in La Razón (Bolivia) on 19 September 2006. Translation by Yoshie Furuhashi (@yoshiefuruhashi | yoshie.furuhashi [at] gmail.com).